LOS GARABATOS

ETAPAS EVOLUTIVAS DEL DIBUJO INFANTIL

Entre los autores que han estudiado el dibujo infantil, destacamos a los norteamericanos Viktor Lowenfeld, en algún caso con William Lambert Brittain, y Rhoda kellogg, y la francesa Liliane Lurcat, por ser quienes han prestado especial atención a la etapa del garabato, considerándola fundamental para la adquisición de los hábitos y destrezas gráficos.

“DESARROLLO DE LA CAPACIDAD CREADORA”
del norteamericano Viktor Lowenfeld


La insistencia de Lowenfeld en las capacidades creativas de todo ser humano, en el estudio evolutivo, tanto plástico como psicológico, de los niños y sus creaciones y en el enfoque pedagógico, centrado en la libertad
creadora de los pequeños, son pautas perfectamente defendibles en la actualidad.


Autores que han investigado en este ámbito:
• Georges-Henri Luquet: “El dibujo infantil” (1927) centrado más en los aspectos psicológicos de los niños.
• Louis Corman: “El test del dibujo de la familia” (1967) interpretaciones de corte psicoanalítico.



“EL ARTE INFANTIL. CONOCER AL NIÑO A TRAVÉS DE SUS DIBUJOS” Aureliano Sáinz (2003)
La propuesta de las etapas de la evolución de la  expresión gráfica del escolar hoy, sería:
1.Etapa del Garabateo (1,5-2-3 años).
2.Etapa Preesquemática (4-5-6 años).
3.Etapa Esquemática (7-8-9 años).
4.Etapa del Comienzo del Realismo (10-11 años).
5.Etapa del Realismo Visual (12-13-14 años).


Etapa del GARABATEO
(1,5-2-3 años)


En esta etapa no hay una auténtica motivación para representar objetos o personas sino simplemente una motivación hacia el movimiento.
• De 18 meses a 2 años: Les gusta garabatear  libremente sobre grandes superficies. Su  coordinación motora aún suele ser torpe.
• De 2 a 3 años: El niño desea probar nuevas  herramientas (rotuladores, acuarelas...) La experimentación predomina sobre la  expresión y la coordinación se va  desarrollando.


Tres fases diferenciadas del garabateo:
1. Etapa del garabateo no controlado
2. Etapa del garabateo controlado
3. Ideograma

1. Etapa del garabateo no controlado: 

El niño comienza a garabatear en torno a los 18 meses. Estos primeros dibujos no tienen sentido ni representan nada, y son desordenados, porque el niño aún no tiene ningún control sobre sus movimientos. Cuando dibuja, el niño hace movimientos burdos, y al dibujar mueve todo el brazo. Es común que el niño ni siquiera atienda cuando dibuja. En este momento, el niño aún no muestra ningún interés por el color.


Primeros garabatos:


Barridos: líneas continuas en forma de zig-zag. El niño coge el lápiz con el puño cerrado, movimientos de vaivén.
• Trazados circulares: cuando al movimiento del brazo  pivotando sobre el codo se le añade el de rotación del hombro.
• Bucle: maduración motriz del brazo, añadimos la flexión de la  muñeca, con lo que se logrará completar los movimientos básicos del brazo
Con los trazados circulares podemos ya observar el sentido con el que cada niño ejecuta sus movimientos, aquí podemos saber si van a surgir dificultades en el momento de la aparición de la escritura.

2. Etapa del garabateo controlado: 

A partir de los dos años y medio, hasta los tres o tres  y medio. El niño se va dando cuenta de cómo sus movimientos afectan al papel y el niño se siente atraído al comprobar como su movimiento afecta a su entorno. En este momento al niño ya le atraen los cambios de color cuando garabatea. Control perceptivo: el niño mira a sus trazados al mismo tiempo que los ejecuta. El pequeño pasa de coger el lápiz con la mano a utilizar los dedos


Tres modalidades: 
• Trazados continuos: líneas extensas que se desarrollan de forma alargada linealmente o en forma curvada. Los más relevantes son el cicloide, el epicicloide y la espiral.
• Estructuras: garabatos memorizables. Diagramas (círculo, cuadrado, triángulo, cruz, aspa y forma irregular cerrada), combinaciones (cuando se unen dos diagramas) y agregados (tres o más diagramas)
• Configuraciones: los mandalas, los soles y los radiales.

3. Ideograma: 

(Fase de transición hacia el dibujo, que tiene lugar mayoritariamente cuando el niño se acerca a la edad de cuatro años) Comienzan a dar nombre a sus garabatos. Es el comienzo de la unión entre dos formas de expresión: la gráfica y la verbal. . Etapa es similar a la que Georges-Henri Luquet llamaba etapa del Realismo Fortuito. El niño observa los garabatos y les busca un significado: “eso es una casa”, “ese es un niño”. Pero esta explicación es a posteriori; el niño no intentaba dibujar eso y no hay concordancia de color (por ejemplo, lo que ha dibujado con su lapicero rojo dice que es un árbol).

Etapa
PREESQUEMÁTICA  o  comienzo de la  figuración (4-5-6 años)

Primeras representaciones de objetos y figuras reconocibles para un adulto.

• Generalmente, la primera figura lograda es la humana. Esta se constituye por yuxtaposición, inclusión y combinación de trazos ya dominados con anterioridad. Se le suele denominar "monigote", "cabezudo", "cabeza-pies" o "renacuajo".

• Comienzan a expresarse a través de sus dibujos y a veces, antes de comenzar, nos explican que van a dibujar.

• Disfrutan del color, puede ser emocional y casual.

Características generales:

• Ausencia de un plan consciente, por parte del niño, previo a la realización  del trabajo.

• Trazado del dibujo por adición, es decir, que la figura trazada es la suma de  las partes unitarias de las que está compuesta.

• Evolución constante de la figura humana, que, partiendo de una forma  primaria y asexuada como es el renacuajo, llega alcanzar la de muñeco, en  la que se expresan los rasgos esenciales de los géneros masculino y  femenino.

• Construcción del espacio de modo subjetivo, evolucionando desde una  representación flotante de las figuras y objetos hasta una organización  primaria, obtenida a partir de la creación de la línea de base.

• Uso del color de forma subjetiva, sin que exista una correspondencia  entre los colores de la realidad y los de las figuras y objetos dibujados.  Hacia el final de la etapa del comienzo de la figuración, se pueden ver las 

primeras sistematizaciones cromáticas.

Característica significativa:

• Las primeras figuras son de carácter asexuado: no es  posible distinguir el género al que pertenecen. Hacia la mitad de los  5, aproximadamente, se percibirá la primera diferenciación por dos  elementos que dibujan como símbolos de los sexos: el pelo largo y la  falda para la mujer y el pelo corto y el pantalón para el hombre.  Pueden aparecer otros elementos secundarios que sirven para  reforzar la identidad de un género u otro, como pueden ser  sombreros, pendientes, bolsos, collares, etc.

Etapa Esquemática  (7-8-9 años)

Relaciones entre los objetos y ya no trabaja sólo con dibujos de objetos aislados unos de otros: esto se evidencia con la aparición de la línea que representa el suelo y que proporciona una base al resto de los dibujos. Más tarde aparecerá “el cielo”.

• Es común en esta etapa que dibujen con transparencias y, como si estuvieran sacando una radiografía, los muebles de una casa pueden verse a través de la pared.

• Los tamaños y las proporciones son emocionales pero un poco más cercanos a la realidad

• Las figuras humanas y el entorno espacial se representa de formal frontal

Características generales:

• Antes de comenzar el dibujo, el niño reflexiona sobre lo que desea representar, así como el modo de llevarlo a cabo; es decir, hay un pequeño plan de trabajo.

• Las figuras aparecen dibujadas por contorno, superando de manera definitiva el dibujo por adición.

• Tras la continua evolución de la figura humana, adopta unos esquemas corporales que le sirven para representar al género masculino y al género femenino.

• Aparecen los intentos de objetivación espacial. Las figuras y los objetos dejan de flotar en el espacio topológico, estableciéndose ciertas relaciones gráfico espaciales entre ellos. Surgen, no obstante, soluciones de corte subjetivo para la construcción de la profundidad espacial. Hacia el final de la etapa, hay niños que la logran representar mediante una perspectiva infantil.

• Se establecen unas relaciones permanentes de tipo esquemático entre los colores de la realidad y los dados por el niño a las figuras y objetos representados.

Etapa del Comienzo  del Realismo (10-11 años)

Primeros intentos de representación de la realidad física tal como es percibida visualmente.

• Nueva actitud crítica hacia el trabajo que realiza, provocándole constantes modificaciones en su manera de dibujar y pintar, y distanciándose de la espontaneidad y la grata aceptación con las que abordaba las producciones plásticas hasta la etapa esquemática. Empezará a surgir poco a poco, la denominada crisis del dibujo (dependerá del enfoque educativo del enseñante) leer (pág. 171) Sáinz

• Cambios psicológicos, emocionales y conductuales que se reflejan en la actitud del niño hacia la expresión

plástica y a las materias creativas en general.

En el comienzo del realismo ya no se tienen esa predisposición abierta, espontánea y alegre hacia la plástica.

Solamente aquellos que reciben la aprobación de sus producciones, según esa idea del dibujo como reproducción fotográfica, adoptarán una postura activa hacia el dibujo y la

pintura. El resto lo realizará como un trabajo escolar o como parte de una asignatura que hay que cumplir. Este bloqueo se traduce en la frase que el niño repetirá de adulto: “Es que el dibujo se me da mal”, como si fuera una cuestión innata, que viniera ya predeterminada de una forma casi absoluta en la

persona.

• En los comienzos del realismo, el alumnado ya no tiene la seguridad que hasta ese momento poseía. Necesidad de una buena orientación del aprendizaje de las destrezas gráficas y en el amor hacia la expresión plástica.

Rasgos comunes en la elaboración de la figura humana

• Proporcionalidad o abandono del recurso a la 

exageración.

• Pervivencia del cromatismo plano

• Ampliación del movimiento y la gestualidad

• Aproximación visual

• Diferenciación de temáticas